
LOS PROBLEMAS ESTRUCTURALES DEL MERCADO LABORAL ARGENTINO EN UNA PERSPECTIVA COMPARADA
Fecha:05/01/2015 | Revista: Info Pluss | Edición: ENE/2015
El Instituto de Estudios sobre la Realidad Argentina y Latinoamericana (IERAL) creado por iniciativa de la Fundación Mediterránea tiene como objetivo promover la libre investigación de los problemas económicos nacionales mediante el análisis y la investigación contribuyendo de esta manera con el mejor conocimiento y solución de los problemas en el ámbito económico. En esta ocasión, ofrecemos un estudio sobre la realidad de nuestro mercado laboral.
La Argentina ha desaprovechado un contexto de inédito crecimiento económico a lo largo de los últimos años para instrumentar reformas estructurales que le permitirían sortear problemas de fondo que, tarde o temprano, acaban por restringir los procesos de crecimiento. La situación del mercado laboral es un claro ejemplo de ello. Esto puede analizarse en perspectiva a otros países, como por ejemplo Chile y Australia.
• Los resultados dan cuenta de que en Argentina la tasa de actividad para el año 2012 alcanzó en promedio al 46,3% del total de habitantes (unos 18,3 millones), mientras que en Australia resulta del 51,6% y en Chile del 56,3% de su población. Esto configura una primera deficiencia estructural, las relativamente bajas tasas de participación.
• Por otro lado, la tasa de desempleopromedio de 6,9% para 2012 (cerca de 1,3 millones de desocupados) contrasta
contra un 2,2% en Australia, lo cual indica que aún hay trabajo por hacer para lograr la inclusión laboral de los trabajadores, sobre todo de aquellos que cuentan con menores oportunidades de inserción. Esto es, una segunda cuenta pendiente.
• En tercer lugar, existen en la Argentina unos 3,4 millones de asalariados en el ámbito público, los cuales llegan a representar el 19,4% del total de ocupados. En tanto que en Chile (aunque con organización unitaria) alcanza al 9,7% de sus ocupados, pero en el caso de Australia (de organización federal) el empleo público representa el 16,3% entre los puestos ocupados. En base a esto, puede inferirse un cierto sobredimensionamiento local del empleo público, el cual podría tornarse más problemático aun si se consideran las altas tasas de expansión deeste tipo de empleo observadas en los últimos años. En este caso, se trata de una tercera problemática que no debe ser dejada de lado.
• Además, se destaca que en Argentina existen 6,8 millones de trabajadores en empleos precarios y de baja productividad, los cuales llegan a representar el 38,9% de los puestos ocupados; mientras que en Chile esta incidencia alcanza tan sólo al 18,6% y en Australia es prácticamente nula (0,2% del total de ocupados). Este constituye el cuarto problema estructural del mercado laboral local, para el cual resulta imprescindible plantear estrategias que mitiguen la abrumadora incidencia del empleo informal y de baja calidad.
• En consecuencia, en Argentina tan sólo el 41,3% de los ocupados (unos 7,3 millones) se encuentran ocupados en puestos formalesdel sector privado. Esta incidencia, como contracara de los antecedentes observados, resulta significativamente inferior a la observada en Chile (71,7%) y Australia (83,5%). He aquí un grave problema para la economía local, que sintetiza a los anteriores: cuenta con muy pocos ocupados en actividades formales y de mayor calidad en el sector privado.
• A futuro el mayor desafío reside en sentar las condiciones esenciales para permitir lainclusión laboral y social en empleos plenos bajo los circuitos productivos formales del sector privado, para quienes en la actualidad se desempeñan en empleos informales, bajo las reglas de la subocupación horaria o que se encuentran en condición de desempleo.
• La estrategia debe, por tanto, promover una Argentina competitiva, con alta inserción externa, basada en sectores estratégicos para el desarrollo y generadora de mayor valor agregado; productiva, en el sentido de promover empleos formales y de mayor retribución; y federal, contemplando las diferencias regionales existentes y las potencialidades de desarrollo estratégico local.
Fuente: Daniel Martínez