
Economía 2021: la presunción del Gobierno sobre la que alertan los especialistas
Se aprobó el Presupuesto 2021 y los especialistas criticaron que de dejara fuera los beneficios sociales
La semana pasada se aprobó en la Cámara de Diputados el Presupuesto de 2021, el primero del presidente Alberto Fernández, donde se especifica el gasto que el Gobierno va a asumir, así como la estimación de los recursos económicos contemplados para el próximo año. Según señalaron los especialistas consultados por LA NACION, dentro de la previsión económica de ese período, si bien es posible una expansión de la recaudación, se deja fuera de las estimaciones los beneficios sociales y empresariales que debieron asumirse con emisión monetaria durante la pandemia bajo el supuesto de que termina la pandemia.
El Presupuesto contempla un incremento de un 5% del Producto Bruto Interno (PBI), un déficit primario de 4,5%, una inflación del 29% y un dólar promedio de $102,4. Entre otros aspectos, dentro de la proyección también se prevé la duplicación de gastos de capital, que alcanzarán el 2,2% del PBI, con el fin de aplicar un plan de obras públicas.
En tanto, no hubo ninguna previsión que permita la continuidad de los beneficios sociales que fueron creados en el transcurso de este año para morigerar el impacto del coronavirus sobre la economía de familias y empresas.
El economista y director de EPyCA Consultores, Martín Kalos, sostuvo que, según la proyección para el 2021, se cree que habrá un crecimiento al principio de año, en promedio respecto de 2020. "El presupuesto es sostenible si se cumple la idea de crecer un 5,5% en 2021, una proyección que viene de la mano de la política del Gobierno para desplegar en la pospandemia. No obstante, no tiene previsto partidas para transferir a las familias y a las empresas las ayudas que otorgó este año", expresó.
Dentro del Presupuesto está contemplada la eventual llegada de la vacuna contra el Covid-19, pero no los programas de ayudas sociales y empresariales. "Es fuerte asumir que (el virus) va a desaparecer de buenas a primeras y con eso la necesidad de transferencias. En la pospandemia no es que vuelven a crearse los puestos de trabajo perdidos de un día para el otro, y tampoco hay mucho espacio para los créditos de consumo. Va a resultar difícil aguantar para la gente que no tenga más esos ingresos. Hoy sería más atinado atender la emergencia actual", sentenció.
Por otro lado, señaló que, si se puede reducir el déficit al 4,5% del PBI el año próximo, es posible que muchos de estos planes no estén dentro de los gastos.
"El Gobierno está planteando una financiación en pesos con emisión monetaria con montos moderados. En ambos casos, lo va a poder hacer, si consigue financiamiento extra. Pero estos números que estamos viendo solo se pueden sostener si el Gobierno va a poder controlar el tipo de cambio, y las expectativas hoy están jugándole en contra", subrayó.
Según un informe de la Oficina de Presupuesto del Congreso (OPC) se estima que la recuperación de la recaudación tributaria para 2021 sea de un 6%, mientras que en el Presupuesto 2021 se estima que este año terminará con una contracción de 9%.
En esa línea habló el economista Claudio Lozano, quien sostuvo que el Presupuesto es muy moderado, donde el gasto cae respecto al del año actual. "Está pensado con la discusión del Fondo Monetario Internacional (FMI). El gasto no se expande, cae respecto de la evolución del Producto por la previsibilidad económica. Lo que es difícil de prever es la tasa de inflación", planteó.
Según señaló Lozano, el supuesto de que la pandemia terminará en 2021 es muy delicado como para que no se contemplen ninguno de los beneficios sociales dispuestos en 2020. "El Presupuesto no incluye ninguno de los refuerzos que el Estado planteó este año. No hay IFE (Ingreso Familiar de Emergencia), ATP y los programas alimentarios se reducen en términos de recolección de recursos y eso no parece tan fácil que ocurra. En caso de que la pandemia no afloje, habrá que discutir de nuevo estas metas", indicó.
Además, aseveró que se prevé que la recaudación va a ser mejor en términos de lo que estuvo sucediendo este año. "También se puede pensar que detrás hay una previsibilidad por una expansión de inversión pública que se duplica respecto del año actual y se ubica dentro del 2,2%, por lo que está por debajo de los niveles que tenía en 2015. Se cree que habrá una recuperación luego del ajuste que tuvo en 2018, 2019 y 2020", describió.
"La inflación está un poco subestimada y por debajo de los valores reales; previendo la actividad económica es difícil pensar que vaya a bajar. Tendría que haber un sistema más firme en el control de gasto y con un crecimiento de la economía", concluyó Lozano.-
Fuente de la Información: www.lanacion.com.ar